Mis críticos de arte favoritos

Mis críticos de arte favoritos

 

Pensé que esta vez no encontraría hueco para escribir acerca de este día tan importante para mi. Pero sí, claro que lo he encontrado, el que busca siempre encuentra, aunque a veces no sea lo que uno quiera encontrar…

El 15 de octubre inauguramos mi exposición, y hablo en plural porque sin la presencia de todos los que allí estuvieron, no hubiese sido lo mismo, así que aunque sea un poco tarde ya, desde aquí muchas gracias por acompañarme en este día. Eché de menos a gente, sí, a otros no, aunque luego en mi repaso mental me acordé de casi todos, pero todos los que vinisteis me hicisteis feliz, y así estaba… sólo hay que ver la imagen.

 

Contenta

Contenta

 

Me gustan las fotos que me hicieron ese día. Las que me hizo Jorge y las que hizo, desde puntos de vista distintos, la fotógrafa del Ayuntamiento. Muchas gracias. Me encantan las imágenes, soy feliz viéndolas y compartiendo. Os dejo abajo una galería completa de ese día.

Prepararlo no fue un reto difícil. Tenía bastante obra, no pude ponerlo todo, así que seleccioné. La sala era genial, con mucha luz, techos altos, dos pisos… ideal para lo que había pensado, recrear la zona infantil en un piso y la zona de pintura en otro. La luz, el trato recibido y luego la acogida: concejal, representantes del ayuntamiento, de la oposición, madremía, parecía un acto político en lugar de cultural, pero a las personas siempre nos sienta bien que el resto valore y te respete, y me sentí muy bien acogida. Con todo esto, me resultó muy agradable preparar y presentar este acto.

Tampoco me puse nerviosa, eso lo dejo para mis retos deportivos, jajaja, creo que ya superé esa parte de miedo escénico, que nunca tuve pero que siempre me dejaba cosquilleo en mi tripa revuelta.

Me preparé un pequeño discursillo y creo que resultó bastante familiar y expresivo.

Lo que más valoré, las caras de felicidad de las personas que me quieren contemplando las obras tan personales e íntimas que había decidido mostrar. No es fácil exponer. Cuando decide hacerlo un artista, decide exponer una parte muy importante de sí mismo, y es una forma de mostrar su sensibilidad, pero también su vulnerabilidad, de mostrar sus pensamientos y de gritar aquello que no pudo porque no le quedaba voz que desgarrar… hay personas que esto lo ven peligroso. Yo lo afronté con mucha serenidad, creo, no sé si es la palabra que escogerían los que estuvieron ese día. Pero decidí mostrar lo que sentía, y cuando das ese paso, o lo haces con entereza o no lo haces. Así que lo hice, lo hice como casi todo lo que hago últimamente, con serenidad, tratando de vivirlo desde una distancia que no permita que me emocione demasiado, aunque esta vez no pude contener alguna palabra quebrada, al acordarme de los que más quiero.

Y es que cuando son tan grandes y tan fuertes las emociones que debes vivir, y son tan constantes, un día y otro, y una semana, y un año y así y así… una acaba haciendo una dura capa por la que no deja escapar ningún átomo de sorpresa, de emoción, de expresión… En mi obra estaba todo presente: la dureza, la emoción, la fuerza, el cariño, los recuerdos, las vivencias, la alegría, la inocencia, el dolor, la locura y en definitiva un montoncito de pensamientos y de momentos capturados en color, en textura, en composición, en formatos inesperados, en obras al menos llamativas. Algunos me dijeron que transmitía luz, yo pensaba luz de fuego (tipo pokemon), pero puede que estén en lo cierto.

No sé si tengo luz, pero me siento apagada, es posible que esté reflejada en mis obras, en mi trabajo, pero no la vivo, sólo puedo transmitirla… soy como una medium (ahora pienso en Ghost). Es bonito transmitirla al menos, espero poder disfrutarla más algún día. Me encanta la luz. Nunca uso gafas de sol, porque tengo ansia de mirar, de ver, de disfrutar de todo lo que brilla, del color de las cosas, de la nitidez… Pero también me encanta el rojo, el granate, el fuego (ahora pienso en el infierno, en el fuego de las llamas, jajaja, me parto de mis pensamientos paralelos). No puedo escaparme de ese color.

Qué curioso. Toda la vida diciendo que mi color favorito era el azul. Recuerdo cuando era pequeña que un día decidí que ése sería mi color favorito, y así lo he mantenido, hasta que comencé a hacer mi dossier, no hace mucho, y dije «caray», pues para ser el azul mi color favorito, no he dejado de utilizar el rojo en ninguna de mis obras. En todas sin excepción hay rojo, intenso, vivo, granate, carmin garanza, violeta rojizo, rojo anaranjado, cadmio… Uf, me encanta ese color, y la fuerza que transmite. A mis 40 años he definido mi color. Tenemos toda la vida para hacerlo, no tengáis prisa.

Pues bien, ahora que está montada, en la sala, vibrando con luz propia unos cuadros que ya lo hacían en mis paredes y mi estudio, ya conocéis todos quién soy, qué pienso, cómo siento, qué recuerdos me confunden y me unen. Y ya que nos ponemos, si alguno tiene algún interés especial por alguna de mis obras, o le gustaría que pensase una para un rinconcito de su casa, aquí estoy, a su enterita disposición. Me encantaría poder hacer realidad uno de los proyectos de la segunda parte de mi vida, vivir aunque sea un poquito, de mi trabajo. De este trabajo tan bonito.

Sé que estos posts no tienen mucho éxito, hablar de uno mismo no interesa a muchos, pero es uno que me debía a mi misma, uno irrenunciable en el hilo de mis retos y que si no lo escribiera, faltaría una parte importante de mi.

Gracias por vuestro apoyo, vuestras firmas, vuestras sonrisas, vuestra presencia, vuestras compras, vuestra voluntad y ánimo. Así da gusto seguir, y de verdad sigues pensando que hay gente muy importante en tu vida por la que merece la pena muchas cosas.

 

Os dejo algunos enlaces de los periódicos locales, que también lo han comunicado genial.

 

Os espero en mi próximo reto, este deportivo: me atrevo por fin con una Media Maratón. AY, y esto sí me da cosa. Pero tengo unas ganas!!!!.

Isabel