Hace doce años nacía ella. Mi preciosa.
Hace 13 que comencé a pensar diferente.
Sí, ser madre transforma. Se te impregna (sin notarlo) de super poderes, que si sabes administrarlos, cambiarán tu vida para siempre. Y fuera de tópicos, realmente es así. Sabes que harás cualquier cosa por tu pequeño o pequeña, pero también por tu niño, o por tu adolescente o por los hombres y mujeres que un día serán. Y no habrá nada ni nadie que pase por encima de ese sentimiento. Ese convencimiento te hace invencible, te afirma en tus deseos, en tus convicciones y te hace crecer, junto a ellos.
Gracias a ellos soy la que soy, con sus buenos y malos momentos.
Gracias a ella conquisté muchas metas en mi vida, me embadurné de paciencia y aprendí a leer en su corazón, !!qué bonito es¡¡. Su vida siempre estará marcada por la mía y eso me produce escalofríos, de responsabilidad y de cariño, de miedo y amor. Si pudiéramos sólo estar para que ellos sean libres… si fuera sencillo saber cuándo dejarlos que tropiecen…
Si algún día te paras a pensar acerca de aquello que les has ido dando, procura que lo que prevalezca sea el amor, el cariño, el respeto… el resto no llena.
Si todo aquello que me inspiras pudiera reflejarlo en una obra estaría incompleta… faltaría tu ALMA y eso es lo que más especial te hace. Nunca lo conseguiré, aunque lo seguiré intentando.
Te deseo muchos años más creciendo como eres, disfrutando contigo y aprendiendo de tu ILUSIÓN por todo.
Guarda tu alma y tu sonrisa.
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